Como medida inicial para tratar los muebles
de madera es preciso utilizar un trapo adecuado. Recomendamos utilizar una lana
de acero nº 000.
A
continuación se seguirán los siguientes pasos:
1. Empapar la lana de acero con una fórmula
restauradora. Si la madera tiene manchas oscuras o de tinta, mezclarla con un
aclarador de madera en polvo. Frotar hasta eliminar las manchas, suciedades,
restos de ceras, etc.
2. Sin esperar el secado de la fórmula
restauradora, quitar el producto sucio con una muñeca de algodón. Seguidamente,
aclarar con la fórmula restauradora sola retirándola enseguida.
3. Aplicar el antimanchas (tapaporos) con la
muñeca de algodón. Esperar unas dos horas y dar una segunda mano. Entre cada
capa, lijar la superficie con la lana de acero nº 000 para suprimir los excesos
de producto.
4. Aplicar la cera de patinar del tono de su
elección con la muñeca de algodón. Esperar 15 minutos y repetir la operación
con una capa muy fina en el sentido de las vetas de la madera. Dejar secar unas
dos horas y sacar el brillo con la muñeca de algodón o un cepillo de plumón de
oca.
TRUCOS
DE MANTENIMIENTO.
Los pies, brazos y respaldos de madera se
limpian lavándolos primero con una esponja con agua y jabón. Después seca bien
la madera y aplica un producto quita-arañazos. Si se produce una mancha y no
tenemos espuma para tapicerías, puedes sustituirla por espuma de afeitar.
Después de aplicarla, retírala con agua. Si se ha producido una pequeña
quemadura en la tela del sillón, no tienes por qué retapizarlo. Puedes comprar
motivos sueltos de guipur en una mercería. Cose uno por encima del agujero, y
aplica algunos más de manera aleatoria. Conseguirás un acabado único y original
para la butaca. Si después de lavar las fundas del sofá aplicas almidón en el
planchado, te durarán mucho más tiempo limpias.
ALGUNOS
EJEMPLOS PRÁCTICOS.
Cómo encerar un mueble. El acabado con cera
resulta especialmente atractivo porque aporta al mueble una imagen
aterciopelada que mejora con el paso de los años. Pero además, es un trabajo
necesario que conviene llevar a cabo al menos una vez al año. De esta manera,
se nutre la madera y se evita el envejecimiento prematuro de la misma. Los
pasos a seguir son los siguientes:
1. Eliminar el polvo. Humedecemos un trapo
de algodón con un poco de agua para que no suelte hilos y el polvo se adhiera
sin esfuerzos. No lo empapes, humedécelo simplemente.
2. Repasar la superficie. Limpiamos la
superficie insistiendo en esquinas y recovecos, que es dónde se acumula más el
polvo. Si no se elimina la suciedad antes de encerar pueden formarse
grumos.
3. Aplicar la cera. Para extender la cera,
utilizamos de nuevo un trapo de algodón (es el más aconsejable porque no
desprende pelusas). Después aplicamos el producto en pequeñas cantidades. En el
caso de cera en pasta, también se puede utilizar un estropajo metálico que
deberá ser muy fino (del 0000 ) para que no se produzcan arañazos en la
superficie.
4. Frotar la madera. Extendemos la cera frotando
con energía y haciendo círculos para que penetre bien en la madera. Deja actuar
durante unas horas y saca brillo a continuación con un trapo.
Cómo
solucionar los problemas más comunes.
Pequeñas grietas. Utiliza cera del mismo
color que la silla. Limpia la zona, derrite una barra de cera con los dedos y
aplícala en la grieta. Una vez fría, retira los restos de cera.
Reforzar la silla. Gírala de forma que las
patas queden hacia arriba. Coloca escuadras en las esquinas del marco interior
de las sillas y atorníllalas, así reforzarás bien la estructura.
Madera decolorada. Si la madera se decolora
por efecto del sol, frótala con un algodón empapado en aceite. Deja secar 48
horas y dale otra capa. Aplícale cera natural y sécala.
Reparar el travesaño. Lo primero que hay
que hacer es quitar el travesaño golpeando la pata suavemente. Puedes proteger
la madera con cartones. A continuación, encola las puntas del travesaño y las
juntas de las patas limpiando los restos con una esponja. Hasta que la cola se
seque pon una mordaza que haga presión. Protege la madera con un paño.
Reparar una silla coja. Como consejo
general, coloca siempre un trozo de fieltro bajo las patas de las sillas ya
que, de este modo, evitarás que la madera de las patas se desgaste. Si no has
tomado estas precauciones y tienes una silla poco estable pueden ocurrir dos
cosas:
-
Que una pata sea más corta: sabrás la diferencia colocando cartones hasta que
se estabilice. Una vez averiguada, usa el grosor del cartón para marcar las
otras tres patas con un lapicero. Tumba la silla en una mesa y sierra las tres
patas por la señal. Después lija los extremos.
-
Que una pata sea más larga: para solucionar el problema, coloca la silla sobre
una mesa de forma que sobresalga la pata más larga. Con una regla y un lápiz
marca el trozo que sobra y siérralo. Después lija la pata.
Reparar una tapicería rasgada. Cuando te
encuentres con este problema descose, con ayuda de unas tijeras, la
pasamanería. Luego retira las tachuelas de la zona. Introduce un retal de la
misma tela bajo el roto que, debe medir al menos 2.5cm más que la rasgada. A
continuación, hilvana con hilo fuerte y fino del color de la tela. Remata con
un nudo interno. Finalmente coloca las tachuelas de nuevo y pega la cinta de
pasamanería que has quitado al comenzar.
Eliminación de las manchas grasas de la
tapicería (aceite, maquillaje, chocolate, salsas...). Si es una mancha grasa,
utiliza un disolvente para limpiar en seco, tipo benzol. Prueba primero si la
mancha destiñe. Si no es así, aplícalo sobre la mancha con un algodón. Luego
hay que lavar la mancha para que no queden restos de grasa. Si la tela es
desenfundadle, empapa la funda en jabón líquido y déjala en remojo con agua. Si
la tapicería es fija y no se puede poner en remojo, frótala con una esponja y
agua caliente. En los dos casos debes aclarar bien la tela y secarla con un
secador desde los bordes hacia el centro de la marca.
Restauradora de Obras de Arte Alba Lucía
Guerrero 2009
Investigación:
Carlos E Rodríguez Arrieche 2012
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